Astrid Anna Emilia Ericsson nació en 1907 en la granja Näs, cerca de Vimmerby (Suecia). Tuvo una infancia feliz y ya como estudiante destacó por su faceta literaria. Comenzó a trabajar en un periódico local de Vimmerby en 1924 pero el embarazo de su primer hijo, Lasse, unos años después la obligó a trasladarse a Estocolmo, donde aprendió taquigrafía y posteriormente se convirtió en secretaria. En 1931 contrajo matrimonio con Sture Lindgren, de quien tomó el apellido con el que sería internacionalmente conocida, y tres años después nació su hija Karin. Fue Karin quien la inspiró a crear el personaje de Pippi Calzaslargas y posteriormente a escribir sus relatos.
En 1944 Lindgren publicó su primer libro, Cartas de Brita Mari, tras ganar el segundo premio de un concurso literario organizado por la editorial Rabén & Sjögren. Al año siguiente, 1945, vio la luz Pippi Calzaslargas. El libro fue un gran éxito y Lindgren empezó a trabajar en Rabén & Sjögren como editora de libros infantiles, primero, y responsable de la sección infantil, después, labor que mantendría hasta su jubilación en 1970.
Astrid Lindgren cosechó numerosos premios a lo largo de su carrera: el Nils Holgersson en 1950, el Premio Hans Christian Andersen en 1958 (considerado el Nobel de la literatura para niños), el Premio Internacional del Libro de la Unesco en 1993 o el Premio al Sustento Bien Ganado (también llamado Premio Nobel Alternativo) en 1994.
Lindgren falleció en 2002, a los 94 años de edad, en Estocolmo, dejando una extensa obra y títulos para la historia como Los niños de Bullerbyn (1947), Mío, mi pequeño Mío (1954), Karlsson en el tejado (1955), Los hermanos Corazón de León (1973), o Ronja, la hija del bandolero (1981).
Astrid Lindgren fue una firme defensora de los derechos de los niños, de la igualdad entre mujeres y hombres y de la protección de los animales. En su honor, desde 2003 el gobierno de Suecia otorga el Premio en Memoria de Astrid Lindgren, galardón que se concede a un escritor o ilustrador de literatura infantil y juvenil o a un promotor de la lectura de cualquier lugar del mundo por toda su trayectoria.
Si visitas la página oficial de Astrid Lindgren podrás conocer mucho más sobre esta gran autora y su legado.
Te dejamos con un fragmento de su inmortal obra Pippi Calzaslargas (Editorial Juventud, 2001):
En los confines de una pequeña ciudad sueca había un huerto exuberante, y en él una casita de campo. En esta casita vivía Pippi Calzaslargas, una niña de nueve años que estaba completamente sola en el mundo. No tenía padre ni madre, lo cual era una ventaja, pues así nadie la mandaba a la cama precisamente cuando más se estaba divirtiendo, ni la obligaba a tomar aceite de hígado de bacalao cuando le apetecían los caramelos de menta.
Hubo un tiempo en que Pippi tenía un padre al que quería mucho. También, naturalmente, había tenido una madre, pero de esto hacía ya mucho.
La madre murió cuando Pippi era aún una niñita que se pasaba el día acostada en su cuna y lloraba de tal modo que nadie se podía acercar a ella. Pippi creía que su madre vivía ahora allá arriba, en un lugar del cielo, y que miraba hacia abajo, por un agujero que había en él, para ver a su hijita. Pippi solía saludar con la mano a su madre y decirle:
—No te preocupes por mí, que yo sé cuidarme solita.
*La ilustración, de Ingrid Vang Nyman, pertenece al libro ¿Conoces a Pippi Calzaslargas?