Hoy es el Día Mundial de la Lectura en Voz Alta. Para celebrarlo, hemos decidido dedicar una entrada a sus múltiples virtudes.
Numerosos estudios científicos muestran los beneficios de la lectura en voz alta, sobre todo durante la infancia. En EEUU, por ejemplo, la asociación sin ánimo de lucro Read Aloud tiene en marcha una campaña con la finalidad de que los padres dediquen 15 minutos al día a leer en voz alta a sus hijos (incluso durante el embarazo). Sin embargo, como bien plantea Ana Garralón: «Leer en voz alta es una asignatura pendiente en nuestros países de habla hispana». Afortunadamente, en nuestro país varias asociaciones comprometidas con el fomento de la lectura en voz alta firmaron en octubre de 2016 la declaración De la voz a las letras. En el documento, los firmantes destacan la importancia de esta práctica en el hogar y en la escuela como medio para superar las desigualdades lingüísticas y culturales.
A continuación te enumeramos algunos de los beneficios más importantes de la lectura en voz alta:
- Refuerza los vínculos afectivos entre quienes leen y escuchan.
- Crea una relación positiva con los libros y la lectura.
- Hace posible que el lenguaje literario forme parte de la vida de los pequeños.
- Propicia la atención, la concentración y la conversación.
- Incide en el aprendizaje de la lengua oral y la lectoescritura.
- Interviene en el desarrollo de la lengua materna y las habilidades lingüísticas (entonación, prosodia, vocabulario, etc.).
- Influye en el desarrollo cognitivo, emocional y psíquico.
- Estimula la memoria, la imaginación, la creatividad y la curiosidad.
- Favorece una mejor comprensión de las narraciones y de la lengua escrita.
- Amplía el saber y el conocimiento.
- Ayuda a desarrollar la empatía, la autoestima y la personalidad.
Desde Galimatazo te animamos a practicar la lectura en voz alta con tus hijos, tus sobrinos, tus nietos… Y si puede ser cada día, ¡mejor que mejor!